La nieve de dióxido de carbono (CO2), también conocida como hielo seco, es un medio de enfriamiento muy efectivo y fácil de usar. Se utiliza mejor con conos de nieve o con toberas especialmente diseñadas para enfriar productos en batidoras, mezcladoras, contenedores, cartones, combos o en ubicaciones de embalaje y corte.
El dióxido de carbono líquido se convierte en nieve sólida de dióxido de carbono a –79ºC (–109ºF), cuando se le permite expandirse hasta alcanzar la presión atmosférica. Cuando se encuentra en contacto cercano con un producto alimenticio, la nieve de dióxido de carbono tiene un efecto de enfriamiento de asentamiento profundo.
Las toberas de expansión cuidadosamente optimizadas y diseñadas garantizan la generación eficiente de nieve y el rápido enfriamiento. Hay una variedad de diseños de conos de nieve, desde manuales y transportables hasta unidades integradas permanentes. Todas las unidades tienen incorporados los conceptos de eficiencia más recientes y a la vez cumplen con los estándares de higiene más elevados de la industria.
La familia CRYOLINE® de equipos de enfriamiento de alimentos cumple con estos requerimientos modernos. Para ver qué le funcionará mejor, revise la información contenida en las páginas de producto alimenticio específicas.